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sábado, 23 de abril de 2011

El suicidio de la Iglesia

Es curioso pero la Iglesia se está suicidando. Creo que incluso es pecado mortal.
El número de seminaristas (1.227 en todo el país) volvió a caer el año pasado en un 3 por ciento, con lo que la cifra de nuevos sacerdotes se ha reducido más de un cuarenta por ciento en la última década. Además, casi la mitad de quienes ingresaron en el seminario acabaron abandonando antes de completar sus estudios. La situación tiene consecuencias prácticas en muchas parroquias, sobre todo del ámbito rural, donde los sacerdotes deben multiplicarse para atender a sus feligreses.

El presidente de la comisión episcopal de Seminarios, Angel Luis Sáinz Meneses, asegura que la crisis de vocaciones se debe a varios factores, entre ellos la caída de la natalidad y la secularización creciente que vive la sociedad española.

En clave personal
¿Cuando va a darse cuenta la Iglesia que vive de espaldas a la sociedad y sobre todo a la realidad?. ¿Cuando serán conscientes de que estamos en el siglo XXI y su influencia cada vez es más residual?
La generación de mis padres es creyente, practicante y ha recibido los sacramentos del bautismo y confirmación. Mi generación es creyente no practicante y hemos recibido únicamente el bautismo. La siguiente generación va camino de no ser creyente ni practicante y lo de los sacramentos, como no sean los de la NBA (Kings).
¿Porque este imparable descenso en el número de "clientes"? En este caso no será por la competencia sinó más bien por la incompetencia.
Menos manifestaciones politizadas sobre la familia y más apoyo a los problemas reales del pueblo que no son precisamente el aborto, el uso de anticonceptivos o el matrimonio homosexual...

Démosle un margen de confianza a nuestro amigo Benedicto XVI aunque sus inicios no hayan sido demasidado gloriosos. Esperemos una rectificación y condena de los abusos cometidos, a menores y a mayores.

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